Hay quienes piensan que lo más importante para preparar una prueba deportiva es el entrenamiento físico. Pero realmente lo que nos diferencia de otros deportistas que consiguen el ÉXITO es el poder de la mente.
Cuando hablo del éxito no me refiero a que logres ser campeón de una prueba determinada, sino a que seas capaz de rendir al máximo y luchar contra tus propios “límites” y “adversidades”.
Por lo tanto, es imprescindible trabajar las HABILIDADES PSICOLÓGICAS.
Podemos resaltar varios factores mentales que influyen en el rendimiento como son la motivación, la confianza en uno mismo, la concentración, el control de las emociones, etc.
Todas, entre ellas, se interrelacionan y complementan entre sí, puesto que si perdemos, por ejemplo, el control de las emociones, perdemos también la concentración y esta, a su vez, hace que perdamos la autoconfianza y la motivación que en un principio teníamos. Todo ello hace que no rindamos y que, por lo tanto, fracasemos.
El papel del ENTRENADOR es fundamental para los deportistas. No sé si a algunos os suena el “efecto Pigmalión” o la “Profecía Autocumplida”. Este efecto es unos de los sucesos que describe la creencia que tiene una persona de poder influir en el rendimiento de otra.
Tenemos que creer en nosotros mismos y si somos entrenadores tenemos que motivar a nuestros deportistas.
Desde CREDUS os animamos a que entrenéis estas habilidades psicológicas y la incluyáis en vuestra planificación temporal. Del mismo modo, os animamos a que penséis en positivo y ¡creáis en vosotros mismos!