Consiste en utilizar los movimientos de la vida diaria adaptados a un programa planificado de entrenamiento. Los ejercicios funcionales, además, no suelen ser específicos para una sola parte del cuerpo, sino que implican cadenas musculares.
Si a esto le añadimos el trabajo en circuitos de entrenamiento podemos realizar los diferentes ejercicios en estaciones. En cada estación se trabajan diferentes grupos musculares, evitando cargar músculos en dos ejercicios seguidos. Se pretende hacer un circuito de variados ejercicios que vayan tocando de forma armónica las diferentes zonas musculares del cuerpo.
¿Quién puede realizar circuitos de entrenamiento funcional?
La ventaja es que son ejercicios que se pueden adaptar a todo tipo de personas. Cambiando las dificultades de cada uno de ellos.
¿Cuáles son sus beneficios?
- Podemos obtener resultados en menos tiempo, y siempre personalizando los ejercicios para cada usuario.
- Mejora la movilidad general, tanto articular como muscular.
- Movemos todo el cuerpo sin darnos cuenta. Trabaja músculos secundarios y adyacentes que trae como beneficio las mejoras de las habilidades motrices: agilidad, coordinación y equilibrio.
- Mezclamos ejercicio aérobico y entrenamiento de fuerza.
- Evitamos perder cualquier minuto que tengamos libre para dedicarle al gimnasio.
- Sacamos partido a todo el material disponible en el gimnasio. (TRX, cama elástica, pesas, step…).
- Es divertido, porque utiliza distintos materiales y movimientos que contribuyen al entrenamiento lúdico y a la relación entre los usuarios.
¿TE ATREVES CON UN CIRCUITO?