He aquí algunas recomendaciones para la PREVENCIÓN del cáncer. Ya sabes, no esperes para actuar, porque puedes hacerlo desde ya.
- Aumento del consumo de alimentos ricos en fibra. Es necesario duplicar el consumo de fibra, y para conseguirlo es conveniente ingerir diariamente frutas, verduras, legumbres, cereales, especialmente de grano entero.
- Disminuir el consumo de grasas animales y carnes rojas. Es necesario evitar el consumo de la grasa visible de las carnes y limitar el consumo de embutidos y carne roja, quitar la piel del pollo, no utilizar grasas animales para cocinar (manteca y mantequilla) y limitar el consumo de los quesos grasos, la leche entera y los productos de pastelería y helados.
- Aumentar el consumo de verduras y frutas frescas, sobre todo por el beneficio potencial para la prevención del cáncer de las vitaminas A y C que se encuentran en estos alimentos.
- Seguir métodos de cocción correctos. Evitar freír los alimentos a altas temperaturas y sobre todo no reutilizar el aceite excesivamente. En este sentido, es mejor emplear el aceite de oliva porque resiste mejor las temperaturas elevadas. es preferible cocinar los alimentos hervidos, al horno o al vapor, siendo conveniente no abusar en el consumo de alimentos ahumados, salados o en adobo.
- Evitar la obesidad y el sobrepeso. Las dietas normocalóricas, o hipocalóricas si existe obesidad, combinadas con ejercicio moderado, están recomendadas para reducir el riesgo de cáncer.